Me arrancaré el corazón
y te lo entregaré, aún palpitante.
No podrán decir
que no te quise intensamente.
La belleza de la niña etérea
fue descubierta, sorprendida,
en la oscuridad
por los ojos del que mira
de forma diferente.
Perdida, en el abismo,
se aferra desesperadamente a las ideas.
Una idea se diluye.
Una idea se diluye.
Su esperanza se diluye con ellas.
Como un pez
arrastrado por la corriente,
me he dejado llevar mucho tiempo.
¿Adónde me lleva este océano?
Me hallo perdida en el mundo de las ideas.